Libra Se inicia el 22 de septiembre hasta el 23 de octubre.

MITOLOGÍA

Mito vinculado a Anubis y, sobre todo con Maat, diosa egipcia de la justicia. Ambos se encargaban de evaluar el destino de los muertos y lo hacían con la ayuda de una balanza. En uno de los platillos colocaban el corazón del muerto y en el otro la pluma de Maat o Pluma de la Verdad: si la balanza se equilibraba, el individuo había obrado correctamente; si no, algo había hecho mal y, por tanto, debía pagar por sus consecuencias.
Libra es un signo muy vinculado con las leyes, así como con su cumplimiento y consecuencias. Es un signo justo: le duelen los abusos, los atropellos y la parcialidad. No sólo eso, entiende que cada acción conlleva una consecuencia y por eso meditan y dudan.

SIMBOLOGÍA

A partir de Libra, el individuo comienza a relacionarse con la realidad social que lo trasciende y a integrarse con ella. Este nuevo ciclo comienza, pues, en el signo de la balanza, donde el individuo se enfrenta a la más simple de las relaciones interpersonales, la confrontación íntima de dos personas, y termina en Piscis, donde el sujeto, una vez que se ha integrado socialmente, busca la unidad mística con el universo. La vida se compone de etapas que se suceden, y no es posible acceder a la visión mística y espiritual de la vida (Piscis) sin haber antes consolidado un ego (Leo) o haber aprendido los deberes y responsabilidades de una relación bipersonal (Libra).
Libra es el primer signo en el que el individuo se acomoda por primera vez a otro en una relación de persona a persona, pero también es un signo de evolución estética, con un fuerte amor por la belleza y la armonía. Por otro lado, no es tan inmaduro con respecto a la integración social como pueda serlo Aries en cuanto a la formación del individuo. Hay que recordar que Aries es el primer signo de fuego, mientras que Libra es el segundo signo de aire, después de Géminis. Libra es muy hábil para tratar con los demás y posee un gran conocimiento del arte de desenvolverse bien, y con frecuencia es capaz de salirse con la suya mientras da la impresión de estar cediendo. Es un maestro en el arte de tomar la iniciativa de tal manera que los demás no se dan cuenta de que alguien lo ha hecho.
En el mandala zodiacal, anterior a él descubrimos a Virgo, un signo precavido, reservado, inteligente, que se acopla a un sistema mayor al que sirve. Con Libra damos un paso más y nos adentramos en el mundo de las relaciones. Representa ya a un ser desarrollado, que conoce el ego y sus limitaciones; el valor de la familia, la importancia del trabajo. Pero sobre todo representa al ser preparado para asociarse.
Todavía se entiende mejor si analizamos a su opuesto, Aries. El carnero representa el ego, el yo. Siempre siguiendo su deseo, preguntándose continuamente qué es lo que quiere con una naturalidad muy desconsiderada a lo que le rodea. Por tanto, Libra simboliza el otro, el tú. Y aunque, por supuesto, también sigue su deseo, como dijimos, se supedita al otro y es que este signo ya es lo suficiente maduro como para comprender que vivimos incompletos y necesitamos del prójimo si queremos ser felices.

RASGOS PSICOLÓGICOS

Libra es un signo de aire, masculino y cardinal. Sin embargo, sí que es cierto que suele costarle esfuerzo admitir la existencia de una relación que esté más allá de la que se establece entre dos personas. Suele ver las cosas como polaridad: yo frente a tú, nosotros frente a ellos. Y muchas veces, el “frente a” puede sustituirse por el “junto con”. La idea central es que Libra no puede concebirse en un vacío, porque necesita de otro para completarse. Esto no significa que tenga que haber sumisión; muchas veces, es el dominante en la relación, porque el aprendizaje de Libra es la igualdad.
Libra necesita siempre establecer una relación de intimidad, y tan pronto como se acaba una debe empezar otra. Las personas de este signo suelen ser hábiles en profesiones donde son básicos el contacto de persona a persona o el asesoramiento, como el derecho o la psicología, aunque hacen falta otros aspectos de la carta para matizar todo esto.
Está muy interesado por el arte y la belleza. Este gusto por lo bello puede hacer que no sepan apreciar lo tormentoso, lo intensamente personal, dramático o emocional si estas características se anteponen a la belleza. Como signo de aire, puede quedarse solo en lo bonito y en el envoltorio, porque le cuesta adentrarse en los sentimientos intensos y profundos, y esto no solo le sucede con el arte sino con la vida en general.
Los signos de aire se sienten a gusto en el universo de las ideas: teorías, abstracciones, necesidad de socializar, intercambiar pensamientos y estimularse intelectualmente de manera desapegada y objetiva el aire es de naturaleza fría y racional. Y aunque Libra será capaz de perderse por uno o más amantes, también actuará con mucha ironía, cortante y afilado cual espada, y pondrá fin a una relación si así, tras mucho reflexionar, lo estima. Eso sí, en seguida reemprenderá una nueva búsqueda del otro.
Aparte, como signo cardinal y masculino, goza de su poderío. No dispone de la flexibilidad geminiana ni de la improvisación anárquica de Acuario, los otros signos de aire. Es estratega y le gusta mandar o, para matizarlo un poco, necesita imponer su voluntad. Lo que pasa es que su voluntad depende de un pacto, de un acuerdo con el otro. Así, los librianos resultan excelentes mediadores, diplomáticos y expertos en salirse con la suya sin que nadie proteste ni se sienta herido.
Así, se trata de un nativo de agradables modales, refinado sentido estético y un puntito hedonista. Pero no tiene el carácter “disfrutón” primitivo de Tauro -con quien comparte a Venus como regente. Antes que en los sentidos, Libra basa su goce en conceptos abstractos: Tauro puede acudir a un bar de barrio donde sirven un delicioso y nutritivo potaje. Libra es un poquito más pedante o snob y prefiere un restaurante temático con una banda de música jazz y comida bien presentada y conceptual.
Por supuesto, debido a su regente, invierte mucha energía en asuntos amorosos pero aquí también difiere de Tauro: su ideal de pareja no es posesiva ni apasionada, sino que obedece -o aspira a obedecer- a unos principios de equidad.
Además, como a Venus se le conecta con la energía del dinero, encontramos en Libra a un aficionado a las compras y con dificultades para ahorrar.
En cualquier caso, tenderá a interpretar el mundo como un baile entre complementarios, donde todo ser resulta incompleto por sí mismo. Siempre buscando pareja o, dicho de otra manera, buscando la manera de completarse a través de los otros.
Desde luego, el zodiaco le otorga un montón de cualidades para su tarea: así, los Libra son muy agradables, ocurrentes, comprensibles, cordiales; saben escuchar y, sobre todo, seducir. Fijaos que este arquetipo capta en seguida los valores y necesidades del otro; es más, modifica su conducta para poder complacer a los demás, de ahí que a veces se le tacha de frívolo, falso, oportunista y un poquito intrigante. Y algo de cierto hay en estos adjetivos, porque no tiene ni un pelo de tonto.
Libra vive debatiendo, socializando, estudiando diferentes puntos de vista para conseguir formar una opinión objetiva y equilibrada de cualquier asunto. Detesta los extremos y aspira al camino de en medio, una vía bien complicada ya que, si se decanta por cualquier opción, invalida automáticamente el resto.
A menudo, se bloquea. Retrasa interminablemente la toma importante de decisiones. Y como buena balanza, donde todo lo que sube, baja, atraviesa tremebundos vaivenes, períodos activos de optimismo con etapas de tristeza y desidia. Un día anda por las nubes y se come el mundo y al siguiente es el signo más descorazonado del mundo.
Gracias a su imparcialidad y su empatía hacia todos los puntos de vista, a Libra se le considera no sólo un signo de justicia; también es el signo de la paz. Es el árbitro del zodiaco, el gran conciliador, el anfitrión capaz de reunir en su casa a dos partes enfrentadas y conseguir que estas lleguen a un acuerdo. En su afán por sembrar la paz y la armonía, puede volverse muy guerrero.
Libra necesita rodearse de ideas, de personas, de objetos bonitos y, de alguna manera, es un signo muy vinculado con las apariencias que prefiere no enfrentarse a sus emociones más oscuras. Escurrirá el tema. Sonreirá y fingirá no haberse dado cuenta de nada. Así, ajenos a sus propios patrones internos, repetirán, una y otra vez la misma historia con diferentes socios y parejas. Una y otra vez.
La principal característica de este tipo es el punto de equilibrio de la balanza. Es el equilibrio acompañado de la reflexión que con buenos aspectos representa la igualdad de peso, pero afligido es el desnivel que tanto se puede manifestar por exceso o por defecto, mucha reflexión o poca.
Es un punto bastante importante ya que puede dar personas que después de reflexionar los asuntos antes de entrar en acción, quedan en esta posición de reflexión sin avanzar ni realizar lo propuesto.
Signo de gran refinamiento. Es típico de elegancia y estética, son personas elegantes de por sí, no necesitan ornamentación ni joyas para destacar por su elegancia. La sencillez es su mejor arma.
Enormemente sociable. Indica sociedad y sociabilidad. La sociedad o asociación forma parte de su misma persona, hasta tal punto, que muchas veces son totalmente inoperantes, ya que no concibe la vida sin estos lazos de unión. Para una mujer libra uno de sus mayores fracasos es quedarse soltera.

ASPECTOS POSITIVOS

Son personas simpáticas y ponderadas, amigas de dar consejos.
En sociedad necesita a la gente y el ambiente.
Una característica de este signo es la idea momentánea y la rapidez de ejecución para proseguir con un total enfriamiento de la cuestión.
En general podemos decir que son: equilibradas, justas, delicadas, sociables, diplomáticas, refinadas, con gusto artístico, afectuosas, reflexivas y con tendencias pacificadoras y asociativas.

ASPECTOS NEGATIVOS

Pueden poseer tendencias extremistas, les molesta un cuadro mal colgado, cuentan los ladrillos de una habitación.
Como tienden a valorarlo y sospesarlo todo a veces sucede que cuando ya se han decidido la oportunidad ya les ha pasado. No son buenos para respuestas rápidas ni situaciones imprevisibles.

LIBRA FAMOSOS

Maribel Verdú, Catherine Deneuve, Kate Winslet, Paco León, Julia Andrews, Brigitte Bardot, Monica Bellucci, Marcelo Mastroianni, Groucho Marx, Pedro Almodóvar, Pavarotti, Sting, Sergio Dalma, Julio Iglesias, Eminem, Bruce Springsteen, Martina Navratilova, Serena Williams, Zlatan Ibrahimović, Oscar Wilde, Rumi, F. Scott Fitzgerald, Truman Capote, William Faulkner , Caravaggio, Nietzsche, Gandhi, Margaret Thatcher.