Géminis inicia el 21 de mayo hasta el 21 de junio.

MITOLOGÍA

Para entender el signo podemos recurrir al mito de Mercurio, su planeta regente. De acuerdo con la mitología romana, Mercurio -el Hermes de los griegos- era hijo de Júpiter y mensajero de los dioses. Siempre corriendo de un sitio a otro e intercambiando información.
Cuenta la tradición que, ya el mismo día de su nacimiento, Mercurio se escapó de los mantos de su madre y acabó en el pueblo vecino. Allí robó las terneras que pastoreaba su hermano Apolo. Después, usando el caparazón de una tortuga, inventó la lira, se la regaló a su hermano e hicieron las paces.
El mito nos habla de un arquetipo precoz, necesitado de libertad, lúdico, inventivo, en contacto con sus hermanos y vecinos y un poco tunante -de hecho, Mercurio era patrono de los ladrones y los embusteros. Y es que, a pesar de que lo vigilaban, se divertía gastando bromas y robando: el tridente de Neptuno, el cinturón de Venus, las herramientas de Vulcano…
Además de ser el mensajero de los dioses, Mercurio también se encargaba de conducir al infierno las almas de los cuerpos y traerlas, cuando correspondía, de vuelta al mundo. Una suerte de amoralidad del arquetipo Géminis, capaz de moverse en infinitos ambientes sin enjuiciar, haciendo su trabajo y sacándole partido a cualquier situación. Géminis es muy listo, una frase típica suya podría ser: Ya de camino, aprovecho y…
Tenemos otro mito muy importante sobre Géminis que da complejidad al arquetipo y nos remite a la dualidad. La historia nos cuenta que Cástor y Pólux eran mellizos nacidos de dos huevos junto con otro par de mellizas. Se querían mucho y nunca se separaban el uno del otro. Como cualquier héroe mitológico, corrieron un montón de aventuras, entre ellas el rescate de una hermana.
Pólux era inmortal, pero Cástor no y éste al final fue asesinado por un lío amoroso. Desesperado, Pólux le rogó a Zeus que devolviese la vida su hermano o le privara a él de su inmortalidad. Zeus optó por una curiosa solución: resucitó a Cástor y envió a Pólux al infierno; además, les permitió a ambos cambiar alternativamente de reino. Así, cuando Pólux regresaba a la tierra, su hermano Cástor debía bajar a los infiernos. Lo que Zeus consiguió fue satisfacer las dos proposiciones de la petición.
Así, el nativo de Géminis está llamado a vivir experiencias por pares, que lo sitúan siempre en encrucijadas: ¿A o B? ¿Carne o pescado? ¿Playa o montaña? Llegan dos ofertas de trabajo, recibe dos propuestas para salir por la noche, se enamora de dos personas o da luz a gemelos.

SIMBOLOGÍA

Géminis es el más mutable de todos los signos mutables, porque la mutabilidad es inherente al aire. Como el viento, su naturaleza es moverse muy rápido de un lugar para otro, abarcando todo lo que encuentra, pero sin detenerse demasiado como para obtener una impresión profunda de algo. Géminis es el signo que precede a Cáncer, el primer signo de agua, y por ello no tiene conciencia aún de que hay muchos aspectos de la realidad que están más allá de todo análisis racional o lógico. Es un signo que entiende con mucha rapidez las cosas, pero al que le cuesta comprender empáticamente.
Géminis compensa todo esto con una mezcla de rapidez y de curiosidad. Es un signo muy sociable y ama estar rodeado de gente. Su nivel de energía suele ser alto y capaz de estimular a quienes le rodean, pero nunca llega a ser demasiado alto como para dejar exhaustos a quienes tienen un temperamento más lento. Puede hacer que incluso el más trivial de los encuentros sociales resulte muy interesante, pero tiende a resistirse cuando se trata de conexiones más profundas. Este signo considera que un apego intenso es algo que limita y siente que este tipo de contactos interfiere en su necesidad de vagabundear sin trabas en busca de experiencia.
Al ser mutable, Géminis, como el viento, tiende a rodear los obstáculos en lugar de encararlos de frente. Si se ve sometido a una presión muy fuerte, simplemente cambiará. La coherencia y la constancia pueden ser difíciles para este signo, que pierde el interés con rapidez.
Es un signo que disfruta con los juegos y los trucos. Le encantan los juegos de cartas y los de mesa de orientación mental; también le gustan los juegos en el sentido de complicadas maniobras sociales. Sus tretas no tienen la intención de hacer daño, engañar o tergiversar, pues para él son un juego mental en el que se complace. Sin embargo, su falta de empatía y de verdadera comprensión de los sentimientos puede ser causa de que lastime a los demás sin la menor intención de hacerlo.
Si observamos la rueda del zodiaco, resulta grandioso el salto que sucede entre Tauro y Géminis. Pasamos del signo más fijo y estable del horóscopo al más inquieto. Fijaos que Tauro representaba la etapa del bebé en la que los sentidos se despiertan: la criatura disfruta de sabores, olores caricias y mimitos. En Géminis, el bebé ya es un niño de tres o cuatro años: corretea de un lado a otro, explora, juega, entra en contacto con más críos y pregunta, sobre todo pregunta. De hecho, así se le va la vida a un geminiano: corriendo, jugando, cambiando las cosas de sitio y recopilando datos.
Opuesto a Géminis en el horóscopo encontramos a Sagitario. El signo del arquero nos remite al pensamiento sintético e intuitivo, los estudios universitarios, la filosofía y los viajes largos. Géminis, por su parte, se refiere al pensamiento analítico, la lógica y el razonamiento. Se relaciona con la escuela primaria, los estudios poco profundos -de ahí su afición a los cursillos- y la información rápida de digerir. También con los desplazamientos cortos. Si Sagitario es profesor y enseña, Géminis representa al eterno estudiante.
Sagitario, como arquetipo un tanto religioso, pasa el tiempo embarcado en una eterna búsqueda de la Verdad (su verdad), donde la ética y los principios juegan un aspecto clave. Géminis, por su parte, es bastante amoral: las implicaciones éticas no le interesan ya que para él todas las verdades pueden resultar válidas. No es que Géminis actúe con la intención de hacernos daño; en absoluto: a fin de cuentas, él sólo quiere jugar.

RASGOS PSICOLÓGICOS

Géminis es un signo de aire, polaridad masculina y cualidad mutable. Del aire se trata de una energía pensante, intelectual, enganchada al mundo de las ideas y las teorías y necesitada de libertad para socializar e intercambiar sus pensamientos.
Como signo masculino, además, actúa y sale a la búsqueda del otro. De hecho, no puede pararse quieto y esto se debe, sobre todo a su mutabilidad. Tenemos, por tanto, a un signo muy flexible, versátil, ágil y veloz (quizá el más rápido del zodiaco). También distraído, indisciplinado, superficial y muy nervioso.
Gracias a su chispa y con esta necesidad básica de experimentar intelectualmente la pluralidad de la vida, Géminis se las apaña y consigue vivenciar todas las opciones posibles. Por eso es el signo de la multitarea, capaz de hacer varias cosas al mismo tiempo e incluso parecer que se encuentra en varios sitios a la vez.
Por supuesto, los trucos no siempre le funcionan: a veces se mete en grandes aprietos, pero suele escapar airoso. De todas formas, no le interesa sentirse culpable. Tampoco acostumbra a guardar rencor.
Esto no quiere decir que no se coma la cabeza. Lo hace y mucho – pertenece al elemento aire. Así, cada cierto tiempo y sin motivo aparente, entra en periodos depresivos fugaces de los que sale él solo. Además, es un signo muy indeciso: la duda lo desgasta.
La presencia e influencia de un hermano resulta fundamental para comprender a Géminis. En ocasiones, la relación es subyugada y de idolatría: entonces, colma de honores a su hermano, que es el bueno, el listo, el inteligente, el triunfador y asume un rol secundario que puede desembocar en envidia y rivalidad. Otras, tiene un hermano conflictivo -por delincuencia, drogas, enfermedad o problemas mentales- al que detesta, que le resta autonomía o del que debe responsabilizarse. De la manera que sea, el hermano –el otro– siempre representará un lado oculto y opuesto del nativo de Géminis y lo obligará a entrar en contacto profundo con sus emociones.
Y no importa si la persona no tiene hermanos: surgirán experiencias similares a través de primos, vecinos, colegas de trabajo o amigos. En definitiva, con cualquiera con el que establezca este vínculo geminiano.
Ya mencionamos antes que Géminis representa al eterno estudiante. Mantiene un despierto interés hacia cualquier tipo de información: él quiere saber de todo, sin profundizar demasiado. Y no sólo eso: también necesita compartirlo. Por eso es uno de los signos de más talento con la palabra, ya sea escrita o hablada.
Como mensajero de los dioses, Géminis nos remite al gran comunicador. Es escritor, traductor, periodista, locutor de radio, artista de monólogos, el charlatán y el chismoso. También se refiere a aquel que desplaza datos, personas u objetos: el taxista, camionero, repartidor, cartero y comerciante.
A Géminis le aburre lo rutinario. O se le estimula intelectualmente o se va a otra parte y así continuamente. Necesita variedad.

ASPECTOS POSITIVOS

Posee mucha facilidad de palabra. Son personas sumamente comunicativas, inteligentes y capacitados para dedicarse a varias actividades a la vez. Es amante de los cambios, de los viajes y posee una gran curiosidad intelectual.
Poseen una gran capacidad mental y sobre todo les caracteriza la adaptabilidad, la versatilidad y los cambios constantes.
Es un gran maestro del diálogo y capaz de vender cualquier cosa, objeto, idea…
Es inquieto por naturaleza, siempre quieren aprender y para ellos existen un millón de cosas que son siempre de su interés.
Tienen una gran habilidad manual.
En general podemos decir que son: variables y adaptables, versátiles, intelectuales, lógicos, ingeniosos, imaginativos e inspirados, ambiciosos, espontáneos, simpáticos, locuaces y divertidos, con espíritu viajero, curiosos, comunicativos, idealistas, innovadores.

ASPECTOS NEGATIVOS

Se suelen impacientar y son indecisos.
Su habilidad mental e ingenio junto con la capacidad para dar la vuelta a las situaciones hacen que a veces puedan ser falsos, deshonestos, embaucadores y timadores.
Tienden a dispersarse y pueden ser superficiales.
Les encanta crear polémicas y participar en debates y discusiones.
Géminis es un signo donde la duda y la intermitencia se hayan patentes y es propio de la persona que se siente insegura. Los asuntos acostumbran a carecer de base y se integra en duplicidad de situaciones. Lo que corrientemente llamaríamos “nadar entre dos aguas”.
En general podemos decir que los nacidos bajo este signo son: variables, superficiales, impulsivos, impacientes, inquisitivos, inquietos, nerviosos, irritables, poco prácticos y volubles.

GÉMINIS FAMOSOS

Marilyn Monroe, Johnny Depp, Angelina Jolie, Antonia San Juan, Blanca Portillo, Mario Casas, Prince, Bob Dylan, David Bisbal, Miguel Ríos, Raymond Carver, Tobias Wolff, John Cheever, Federico García Lorca, Fernando Pessoa, Walt Whitman, Arthur Conan Doyle, Jean-Paul Sartre, el Marqués de Sade, Steffi Graf, Venus Williams, Rafa Nadal, Diego Velázquez, Paul Gauguin, M.C.Escher, Rousseau, Raúl Castro, la Reina Victoria de Inglaterra, John F. Kennedy, Henry Kissinger y Donald Trump.